Entendamos a Makito

Este pasado fin de semana en amena plática con obviamente amigos escuché una observación bastante interesante sobre el porque de la actitud frívola de CARLOS VÍCTOR Makito PEÑA ORTIZ, a quien visto esta lo que pase en nuestra madreada, paralizada y muy peligrosa Reynosa le importa una pura y dos con sal, explicando el amigo en cuestión que dijo no ser psicólogo pero que ha leído algunos ensayos sobre esa profesión y en forma bastante sencilla y en su muy personal enfoque refirió que a las personas que no les importa lo que le ocurra a los demás es por falta de empatía.
Ello caracteriza a los narcisistas los cuales demuestran ser egoístas, egocéntricos y dependientes pero que por otro lado suelen ser excelentes alumnos y luego con alto rendimiento académico lo que los torna en exitosos y seguros.
Mi observación al respecto es que si un narcisista forma parte del servicio privado no hay problema, no mientras no afecte a la empresa, ahora que, si el “narciso” es el dueño, a él le costará sus deficiencias.
Pero en el servicio público bajo ningún concepto deben tener cabida los narcisistas porque ahí el servidor público tiene como función fundamental atender y resolver problemas de terceros para lo cual ser requiere contar con el atributo de la empatía, algo que hará que ese servidor público disfrute su trabajo.
Y sin necesidad de ser psicólogo usted como yo amigo lector nos damos cuenta de que en las dependencias públicas abundan los que ven su trabajo como una carga, desde los jefes hasta los empleados menores.
Dan la impresión de que hacen un favor con atender y luego le pasan el problema a otro y así sucesivamente. Eso, como ya lo apunté se ve en las esferas gubernamentales en donde se ve que son muy pocos los de buen carácter y por lo mismo con disponibilidad para atender.
El colmo es que un presidente municipal sea narcisista porque hagan de cuenta se esta tratando de mezclar agua con aceite.
Ahora bien, quienes suelen ser narcisistas, de acuerdo con lo que estuvimos platicando son aquellos que tienen como característica principal el ser hijo único quien al ser objeto del afecto completito de sus padres se va paulatinamente convirtiendo en egoísta, egocéntrico y dependiente, aunque muy bueno para la escuela y ya como adulto, seguro de sí mismo y por ende exitoso.
Pero como lo apunte líneas arriba un narcisista puede tener cabida en una empresa privada no en la política y me parece que si CARLOS VÍCTOR PEÑA ORTIZ es hijo único de ahí le deviene su falta de empatía y por lo mismo poco sensible con sus semejantes.
Hay que recordar que cuando el chubasco del 27 de marzo primero andaba fuera de la ciudad sin ser periodo vacacional y cuando a la de a huevo con papas tuvo que venir se apareció por las colonias entregando refrescos, doritos y croquetas.
Y es que, oiga usted, Makito no podrá sentir algo por la gente, pero si por las mascotas. Él mismo ha subido a sus redes sociales fotografías en donde trata afectuosamente a un perrito y exhortando a la ciudadanía que sean amorosos con los animales.
Por eso cuando hubo problemas de inundación en las colonias, probablemente por eso lo primero que le vino a la mente fue la suerte de perritos y gatitos que los habitantes tuvieran el agua hasta las rodillas eso era lo de menos.
Pero si relato todo lo anterior es nada más para tratar de entender a nuestro presidente municipal porque aunque yo no voté por él como tampoco lo hizo el 22 por ciento de la mitad del padrón electoral que si acudió a sufragar, nos guste o no es la primera autoridad municipal que desafortunadamente por ser hijo único tiene esas deficiencias que si uno viera las compensa con otras actitudes como desarrollar las obras adecuadas para nuestra madreada Reynosa pasaría a ser secundario su carácter narcisista.
Y por otro lado en esa misma platica se explicó que hoy en día no es regla que los hijos únicos sean narcisistas, y ha de ser, pero observemos a las personas que provienen de hogares en donde fueron hijos únicos y la manera verdad los que uno conoce se cargan un ego que no pueden ocultarlos.
No hago estos comentarios con la intención de molestar sino para que lo entendamos, aunque él también debe tomar conciencia que nadie le puso pistola para que se anotara en la tarea de ser presidente municipal y por lo mismo debe dejar de lado sus actitudes egocéntricas que por supuesto son superables, pero hasta la fecha CARLOS VICTOR PEÑA ORTIZ no ha dado muestras de haberla dejado atrás.
Recientemente hubo otra demostración de falta de interés en lo que sucede por nuestra madreada Reynosa: asesinaron arteramente al licenciado ERNESTO CUITLAHUAC VÁZQUEZ REYNA quien fuera delegado de la fiscalía general de Tamaulipas y bien visto por los litigantes y el “City Mayor” se dio cuenta hasta dos días después.
Tampoco tuvo conocimiento del dantesco incendio que puso en peligro a los habitantes de las colonias al poniente de la ciudad, y también le pasó de noche.
Se supone andaba de vacaciones, aunque estas concluyeron el domingo pasado, pero eso será para los empleados menores no para él que se comporta como quien le está haciendo un favor a Reynosa con gobernarla.
Por cierto, el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA se presenta puntualmente al reinicio de labores y a la ceremonia que encabeza todos los lunes para rendir honores a la bandera.
En Reynosa, afortunadamente hemos tenido alcaldes que disfrutaron servir a quienes al sufragar a su favor en las urnas y me viene a la memoria los ejemplos de MANUEL GARZA GONZÁLEZ, RAFAEL SIERRA DE LA GARZA, ERNESTO GÓMEZ LIRA, MIGUEL VALDES REVILLA, RAMON PÉREZ GARCÍA, HUMBERTO VALDES RICHAUD, ERNESTO CANTÚ RESENDEZ, el inolvidable y bien llamado médico de los pobres, SERAPIO CANTÚ BARRAGAN, entre otros.
En pocas palabras, no tiene pinta CARLOS VICTOR PEÑA ORTIZ de que deje de importarle una pura y dos con sal lo que pase por nuestra madreada, paralizada y muy peligrosa Reynosa.
Como dato adicional les digo a mis lectores que el psicólogo que describió las características de los narcisistas fue GRANVILLE STANLEY HALL, pero también les digo que me dijeron no es regla que los hijos únicos sean narcisistas, egoístas, egocéntricos y dependientes.
Y por hoy, BASTA.